Título: La asombrosa bibliotecaria de Little Rock
Autora: Olivia Ardey
Sinopsis + info: Aquí
Reseña: Tras leer la sinopsis, mi primer pensamiento fue: “tiene buena pinta, pero va a ser más de lo mismo”. No podía estar más equivocada. No siempre ser más de lo mismo es algo malo, hay veces que buscas algo de un tipo de corte y luego cada historia es diferente, te cautiva e incluso se convierte en una de tus favoritas mientras que otra la odias a más no poder, aunque tengan aspectos comunes. Me esperaba la típica novela que sucede en un pueblo pequeño, con el nuevo sheriff y la vecina perfecta pero infravalorada.
La novela transcurre en un pueblecito de Estados Unidos en la actualidad. Little Rock es el típico pueblo pequeño estadounidense (o por lo menos el típico que nos venden las novelas) en el que todo el mundo conoce a todo el mundo y todo el mundo juzga a todo el que conoce según una estricta moral.
Nicole Smith quiere ser la chica buena: es bibliotecaria y su pseudo-novio es perfecto. Ante todo no quiere decepcionar y herir a su padre, como hizo su madre cuando los abandonó. Pero algo dentro de ella la hace desear más. No es que quiera una vida salvaje, sólo soltarse el pelo de vez en cuando. Está tan condicionada por el qué dirán que para dar rienda suelta a una de sus pasiones se marcha a un pueblo vecino.
Allan Fergusson es el nuevo sheriff de Little Rock, un tipo duro acostumbrado a la ciudad, a ir y venir sin dar explicaciones y sin que nadie le juzgue. Parece que nada le importa, que todo lo hace simplemente para pasárselo bien, pero en el fondo se protege porque en el pasado le han hecho daño. Él mismo intenta creerse todo esto.
Los personajes tienen una marcada personalidad, y poco a poco se van descubriendo los detalles de por qué son así. Con el coro de personajes secundarios sucede algo parecido: tienen su propia personalidad, su propia historia tras ellos.
Allan y Nicole se conocen cuando él se traslada a vivir a casa de Nicole después de que su apartamento sufra un accidente. No pueden ser más diferentes: él toma todo cuando desea y cuando lo desea, ella piensa y analiza las consecuencias de cualquier decisión antes de tomarla. A pesar de ello, se sienten atraídos el uno por el otro. Así, mientras transcurre la rutina, empezarán a conocerse mejor y poco a poco intentarán descubrir los deseos y secretos más ocultos de la otra parte.
Nicole se tendrá que plantear si prefiere la seguridad de su marine o la cruda atracción que siente por el sheriff, que se ha convertido en su amigo y le insta a que sea ella misma, que se desmelene, que haga lo que realmente desea.
Mientras tanto, en Little Rock se acometen varios delitos sin precedente, lo que pondrá en un aprieto a Allan, encargado de encontrar al culpable. Todo un rompecabezas, que se complica con las continuas intromisiones de los bienintencionados, o no, vecinos.
En mi opinión, la novela te atrapa en ella desde que lees la primera página y te mantiene en vilo hasta el final. Los personajes hacen que te enamores de ellos y cada vez que aparece un personaje secundario empiezas a dar vueltas de las razones que tiene para ser culpable.
Me sorprendió muy gratamente el florecer de la sexualidad, tan enterrada en ella misma, de Niki y la sensibilidad disfrazada de Allan como apoyo constante para que ella libere de una vez su verdadera personalidad.
Desde luego, ¡uno de mis favoritos!
¡¡Muchísimas gracias!! Por leerla, disfrutala, recomendarla, y sobre todo por tu cuidado al no meter spoilers. No sabes cuánto se agradece. En cuanto a lo que comentas, me alegran tus palabras porque odio el "más de lo mismo". Tal cual se lo comenté a mi editora cuando le entregué el manuscrito de mi reciente novela LOS HOMBRES DE TEXAS NO HABLAN DE AMOR, que está narrada de otra manera con todo el protagonismo para ella, su vida y sus circunstancias. Nunca se sabe si va a gustar o desagradar a las lectoras, pero me encanta contar las cosas como me nace en cada momento. Gracias también por apreciar eso. Un beso.
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