Reseña Palabra de McKenzie

Título: Palabra de McKenzie
Autora: Tessa C. Martín
Libro no perteneciente a una serie
Año de publicación original: 2017

Sinopsis: ¿Puede el amor comprometer la palabra de un hombre?
¿Puede el deseo romper las férreas cadenas de la lealtad?
Niall McKenzie es un guerrero frío y autoritario que no está acostumbrado a ser cuestionado por nadie y solo rinde vasallaje a Robert Bruce. Una noche de tormenta se ve obligado a resguardarse en el hogar de los Campbell, aliados de los enemigos de su señor. Al margen de las intrigas de los nobles, Niall cae rendido ante los encantos de las hermanas Campbell.
Aylin es una mujer dulce y virtuosa, la esposa perfecta para un laird como Niall. Eryn, en cambio, es una joven exuberante y rebelde por la que siente una pasión incontrolable.
Su atracción por ambas pondrá a prueba la fidelidad hacia su señor y la dicha justo a la mujer que en verdad ama.
¿A quién dará su palabra?

RESEÑA

Llevaba ya un tiempo sin leer una historia de highlanders, y mucho más sin leer una historia que se ambientara en la época de Bruce, por lo que tenía muchas ganas de leer esta novela.

Niall es el hijo mayor del laird McKenzie, y está muy comprometido con su clan. No se permite ni siquiera pensar en fallarles y toda determinación que toma está determinada por cómo puede afectarles. También es muy importante su señor Bruce, al que es completamente fiel.

Aylin es la hija mayor del laird Campbell, discreta, serie y siempre dispuesta a aceptar la voluntad de su padre sin quejarse. Su hermana Eryn es todo lo contrario: pura energía, inconformista y a la que le cuesta obedecer a su padre. De lo que no cabe duda es que las dos hermanas se adoran y que harían lo que fuera por la otra.

El principio del libro tiene un ritmo extraño, las cosas pasan demasiado deprisa y a la vez no. Creo que algún personaje enseguida se ve “completamente enamorado” demasiado deprisa. No me suelen gustar cuando la palabra amor aparece demasiado pronto, pero en esta ocasión me ha llevado a reflexionar sobre que el hecho de que ellos piensen que están enamorados no significa que lo estén.

Niall me parece un personaje complejo, con el que he estado muy enfadada la mayor parte del libro, pero me parece muy tierno el hecho de que apenas sea capaz de abrir la boca sin meter la pata (esto me gusta como espectadora, si hubiera estado dentro de la relación me habría hartado muy pronto).

Los personajes secundarios me han encantado. Todos. Algunos les he odiado, pero aun así me han parecido buenos personajes. Las subtramas de algunos de ellos me han parecido preciosas y me he quedado con las ganas de saber algo más en algunos casos.

Una de las cosas que más me ha gustado ha sido la ambientación, sobre todo la histórica. Me ha gustado que transcurra durante el periodo justamente anterior a William Wallace. Y lo que más, cada vez que un personaje decía “Palabra de McKenzie”. Me he derretido en todos ellos.

También quiero destacar los tejemanejes políticos que dan durante la historia. Me parece que aportan mucho a la trama y que reflejan muy bien la situación histórica.

Creo que llegó un punto en el que me imaginaba lo que iba a transcurrir en el epílogo, que no es uno al uso. Por una parte, me parece muy imaginativo y un buen final para la historia. Por otro, quita responsabilidades a un personaje que yo tengo muy idealizado y que no siempre lo hizo todo bien.

La novela está narrada en tercera persona y en pasado, por un narrador omnisciente. El estilo de la autora me ha gustado mucho, sobre todo los diálogos. Mi única pega es el ritmo en algunos momentos concretos del libro.

Palabra de McKenzie es una novela de highlanders de las que a mí me gusta, en la que los protagonistas evolucionan y en la que hay rencillas entre clanes. Tiene amor, personajes que merece la pena conocer y tejemanejes políticos.
¡Una gran lectura!